Introducción:
El 2 de julio de 1915, en la ciudad de París, Francia, falleció Porfirio Díaz, quien fuera presidente de México durante 35 años, un periodo conocido como el Porfiriato. Su muerte marcó el final de una era y puso un punto culminante a la Revolución Mexicana que lo había derrocado del poder en 1911.
Los últimos años de Porfirio Díaz:
Tras huir de México en 1911, Díaz se exilió en Francia, donde vivió junto a su esposa Carmelita Romero Rubio y algunos de sus allegados. Durante su exilio, el ex presidente estuvo al tanto de los acontecimientos que se desarrollaban en México, incluyendo la lucha entre las diferentes facciones revolucionarias y el posterior ascenso de Venustiano Carranza al poder.
La muerte de Porfirio Díaz:
A finales de 1914, la salud de Díaz comenzó a deteriorarse. Sufría de diversos problemas, incluyendo diabetes, nefritis y problemas cardíacos. A pesar de los cuidados médicos, su condición empeoró progresivamente hasta que finalmente falleció el 2 de julio de 1915 a la edad de 84 años.
El legado de Porfirio Díaz:
La figura de Porfirio Díaz sigue siendo controvertida hasta el día de hoy. Algunos lo consideran un dictador que reprimió la libertad y la democracia, mientras que otros lo ven como un modernizador que impulsó el desarrollo económico y la infraestructura de México. Sin duda, su largo mandato marcó un periodo crucial en la historia de México y su legado continúa generando debate e interés.
Conclusión:
La muerte de Porfirio Díaz en 1915 significó el cierre de un capítulo importante en la historia de México. Su figura compleja y controversial sigue siendo objeto de estudio y análisis, lo que refleja la profunda huella que dejó en el país.
Bibliografía:
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